Sentencia condenatoria por la importación y venta de equipos de diagnosis fraudulentos y software pirata

Hace tiempo que no publicamos de forma regular notas de prensa que nos pasan nuestros compañeros de CAPA (Comisión Antipiratería para el Automóvil) para hacernos eco de lo que ocurre en el sector y de los avances que se van haciendo en la lucha contra el fraude y la piratería en los equipos y software de diagnosis multimarca.

Pero en esta ocasión hemos querido poner en alerta a los profesionales del sector de la nueva sentencia condenatoria que nos ha hecho llegar CAPA a través de esta nota de prensa.

Insistimos siempre en que vender o adquirir un equipo de diagnosis falsificado, además de ser ilegal, puede acarrear un montón de problemas, ya no solo en cuanto a multas y hasta penas de cárcel, sino ya por la responsabilidad civil que adquieres como mecánico profesional.

Estos equipos no suelen ser fiables y al tener el software pirateado dan errores y fallos en los diagnósticos, con el consiguiente peligro para la seguridad de los coches que analizan.

Y aquí ya no entra la reputación personal y profesional del taller mecánico y de su equipo de trabajadores, sino que ya estamos hablando de temas que pueden repercutir a terceros.

La persecución de estas prácticas por parte de CAPA es implacable y está orientada a acabar con esta lacra que inunda el sector de la automoción, al igual que ocurre con los talleres ilegales y que tanto daño están haciendo a los profesionales del mundo del automóvil.

En este caso la Sentencia del Juzgado de lo Penal número 1 de Vinarós es clara y firme: pena de prisión e indemnización a los afectados.

Pena de prisión por importación y venta de equipos de diagnosis fraudulentos

Mediante sentencia de 5 de octubre de 2021, el Juzgado de lo Penal nº 1 de Vinaròs ha condenado al responsable de la venta de equipos de diagnosis y software Autocom pirata a la pena de prisión y al pago de indemnización a favor de los perjudicados, ello como autor responsable de la comisión de un delito contra la propiedad industrial.

El condenado realizaba su actividad desde su domicilio particular, adquiriendo los equipos de diagnosis fraudulentos a través de portales web tales como Alibaba o Aliexpress, y enviando los productos por medio de empresas de paquetería tanto a talleres como a particulares en España.

Tras múltiples investigaciones, la Policía Nacional de Castellón realizó una entrada y registro en el referido domicilio, donde se intervino dinero procedente del tráfico de productos fraudulentos, así como 16 unidades de equipos de diagnosis Autocom, un portátil conteniendo software Autocom pirata, y anagramas de diversas marcas automovilísticas de prestigio, entre otros efectos.

El condenado llegó a comercializar y distribuir aparatos de diagnosis ilícitos en, como mínimo, 55 talleres del territorio nacional, pudiéndose intervenir 26 de la marca Autocom, y 14 de otras marcas mediante la colaboración de múltiples unidades policiales.

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